un susto y ...que remedios

Ayer pasamos la tarde en la sala de emergencias del hospital de la base. Gracias a la morfina y a la buena atención que recibimos todo se solucionó por el momento. Nunca habia visto a mi esposa llorar por el dolor tan fuerte que sentía y tener miedo a morirse. Tuve que tragar gordo para no llorar también, pero estaba sudando como si estuviese corriendo una carrera de cien metros.

Durante todo ese tiempo en el hospital, recordé cuando mi mamá se quejaba del dolor que le causaba el cancer. Cuando yo estaba a su lado le decía, mas bien inventaba y le explicaba técnicas de relajación para que se le calmara el dolor y, aunque élla decia que se sentía mejor, ambos sabíamos que no era cierto, sólo lo hacía para que yo me quedara tranquilo; aún asi me daba una sonrisa y nos decía que nos quería mucho. En esas ocasiones sentía un deseo inmenso de que me cargara en sus brazos como si fuera un bebe, pero como ya apenas podía levantarse, era yo el que la abrazaba, mientras le pedia a Dios que me pasara el dolor a mi, pues yo era más fuerte que élla...

Volviendo a mi esposa, el lunes tiene una cita de seguimiento. Gracias a Dios no es nada peligroso y los medicamentos que le dieron le van ayudando poco a poco. Esa es la desventaja de estar lejos o no tener familiares cerca, si hubiese estado en PR, la mamá y sus herman@s hubiesen aparecido en la sala de emergencias y nos hubiesen acompañado hasta estar seguro de que todo andaba bien.

A parte de esos agrios momentos, la pasada semana volvió a tener uno de esos eventos "Twilight Zone" que le ocurren a élla. Dos situaciones que más que preocupantes, lo que dan son ganas de reír.

El primero fue que durante el receso de una de las clases, ella fue a preparar un salón para las meriendas de los nenes, pero encontró la puerta del salón cerrada (por lo general esta abierta). Ella tan ingenua (bueno yo hubiese hecho lo mismo), abrió la puerta y de momento tuvo que gritar, bien a lo boricua escandalosa- "Ay Dios mio". El grito fue tan fuerte que el director la escuchó y llegó corriendo hasta donde estaba élla. My friend resulta ser que dentro del salón habia dos estudiantes, un niño y niña de no más de diez u once años, experimentando cosas que no son propias para tan corta edad (aunque no fue tan crítico, pero por su corta edad no esta bien). La cosa es que el director al enterarse le ha caido a cocotazos limpios a ambos muchachitos , luego vino otra maestra koreana quien también les dio su surca, pero cuando llegaron las respectivas madres enonces fue que les repartieron de arroz y de masa. Las madres le preguntaron a mi esposa que si ella también les había pegado, pero ella les dijo que no. Le madres le pidieron (todo esto traducido por la maestra), que cada vez que ella los viera haciendo algo indebido los abofeteara sin piedad y que tenían su permiso. Las señoras mientras seguían cocoteando a los susodichos, le reclamaban como era posible que le hubiesen faltado el respeto a la maestra y al honor de sus familias. Bueno, luego del asunto mi esposa regresó a su salón, para seguir con sus otros niños. Al rato llegó la profesora y le contó que abajo, las otras madres que llegaban, cuando se enteraban, también le daban otra catimba a los convictos sin juicio.Eso fue un arresto, juicio sin vista evidenciaria, mas que de referencia, y sentencia de culpabiblidad con la pena del garrote, desde que se abrió la puerta, todo al mismo tiempo. Mi pana esa pela fue colectiva, asi que imagino que cuando llegaron a sus respectivos vecindarios, tendrían otra sesión mas de paletazos y, no hablo de mantecados. De hecho en las escuelas es una práctica normal, ver a los maestros con una paleta amanza guapos, para pegarle a los estudiantes indisciplinados. Comoquiera siguen siendo igual de jodones y atrevidos, ja,ja,ja.

Dos o tres dias después, fue a tomar té con las doñitas-estudiantes de otro centro y para colmo, en la taquillleria del subterráneo, habia un individuo tirado en el piso que no dejaba pasar a la gente. Como no se sabia si estaba borracho o drogado (ya ven, eso es un problema mundial), llegaron tres policias, quienes le decian al individuo que se levantara y lo reprendian de palabra. El tipo abrió los ojos y de manera desafiante se bajo el cierre de la cremallera, (en good spanish zipper) y se sacó el matruco para enseñarselo a la gente que ya se estaba aglomerado en el lugar. Aquello fue como si le hubiesen mentao' la madre a las mujeres, todas empezaron a gritar frenéticas, a insultarlo y a pedir justicia con el puño cerrado. Mi esposa dice que como estab en "shock", pero más que nada por el alboroto y el revolú por un matruquito fuera de sitio, digo también aguantando las ganas de reírse. Los policias no querian tocarlo, pues aprentemente estaban esperando refuerzos (aunque ya habian tres). De momento llegaron tres guardias anti-motines, de eso que andan con unas macanas negras mas largas que ellos y aunque alli no le pegaron al individuo, lo han enredao en sus macanas formando una especia de camilla, que el borracho parecia que iba enredao en una telaraña de madera. Lo mas impresonante fue que cuando lo levantaron, pues como el rabo se le quedo por fuera y guindando, parecia un culebrón sin vida y a punto de desaparecer. Cuando los guardias lo notaron, lo puesieron nuevamente en el piso, para que uno de los valientes, le acomodara el gusanito dentro del pantalón. Lo peor fue que al que le tocó esa peligrosa misión, lo hizo a mano pela. Cuando se llevaron al rebelde con el gusano por fuera, las mujeres se calmaron, y le dijeron a mi esposa lo abochornadas que estaban porque había presenciado eso. Ella les explicó que no era nada.

A todas estas, durante el evento la gente sacaba sus celulares para tomar fotos y videos del suceso.